“Montiel es más predecible que el lugar de
una antialcohólica el fin de semana”
Yomero
Y resulta que al “monotemático” un día se le quitó lo mono y dejó de hablar de la eterna Margarita; como nunca pudo ser líder de nada ni de nadie, decidió disfrazarse de insurrecto y organizar una revuelta para darle en la torre a su partido, cobrarle venganza a Héctor García y de paso negociar con el sentido de su voto.
Y Eugenio Montiel se chamaqueó (ooooootra vez) a Samuelito García que tenía meses haciendo intentos de arrimar a su parcela a los casineros amenazándolos con incrementar los impuestos estatales; y después se convenció a Karina Barrón, que no la brinca sin huarache, de que si daban la contra a la Ley Antitabaco podría haber alguna “ganancia”; el diputado de Nueva Alianza fue simple comparsa que se subió al barco porque algo le prometieron o de plano por ingenuo.
Y así, el ahora “duotemático” anunció con bombo y platillo que sin importar la línea de los partidos y lo que acordaran los coordinadores, ellos formarían un bloque de 14 diputados para apuntalar el veto del Gobernador, apoyar al Secretario de Salud y sus incansables inspectores y darles en la torre a restauranteros, antreros y casineros que buscan matizar los alcances de una aberrante ley.
Pero ayer se pudo ver el truco, porque para seguir en el tema se organizaron una rueda de prensa y en el presídium estuvieron todos, menos Montiel que se fue a sentar entre los espectadores, dejando en claro que está pero sin estar, lo cual es un indicador de que ya “alguien” lo convenció de la posibilidad de modificar su postura.
Y aunque obligado por los reporteros reiteró su rechazo a que se permita fumar en lugares públicos, su actitud de dejar solos a sus compañeros diputados es una muestra clara de que algo pasó. ¿Resulta creíble que alguien siempre ávido de reflectores como Eugenio Montiel haya renunciado al papel protagónico nada más porque sí?
Y mientras el presidente nacional del PRI, Enrique Ochoa Reza, convocaba a los diputados locales de todo el país a trabajar de manera coordinada y en unidad, en Nuevo León el tricolor sigue siendo un verdadero desgarriate, en donde lo menos que existe es la disciplina y a falta de mando continúan como “pollos descabezados”.
Ya se verá en los próximos días si los 14 son en realidad 14 o si algunos se desistieron, ya por la presión de sus partidos, ya porque los “convencieron” de dejar de insistir en su asonada o si el cabildeo que se trae el doctor de la O., otro activo jugador en el tema que está apostando fuerte a través de uno de sus subalternos, termina por funcionar.
Pero son tan claros, diáfanos, transparentes, lógicos y predecibles, que terminan por dar penita ajena.