“El que un perro haya mordido a un hombre no es ninguna noticia;
una noticia es el que un hombre haya mordido a un perro”
Charles Anderson Dana
Es tan insulso el hecho que no puedo considerarlo una noticia.
¿De verdad es tan sosa la agenda que la designación de Concha Landa como coordinadora de la bancada de Movimiento Ciudadano en el Congreso es digna de ser noticia? ¿Coordinar un grupo legislativo de dos personas del que el antecesor deja el cargo porque se convierte en el dirigente estatal? ¡Recórcholis!
Ya imagino el texto del comunicado: “Luego de 36 horas de intensas deliberaciones en las que se registraron 224 empates, la fracción del Partido Movimiento Ciudadano determinó designar a Concha Landa como su nueva coordinadora para el periodo legislativo que inicia este 1 de febrero”.
¡Paren las prensas, esta es de ocho columnas!
Y si es triste el hecho mucho más lo es la realidad, porque para todo efecto práctico Concha no decidirá ni el sabor de los refrescos que se tomen, ya que ejerciendo su potestad como dirigente estatal del partido, Sammy se encargará de decirle lo que tiene que decidir, de manera que esto es una mala broma, pegarle al “Tío Lolo” o intentar jugar a la democracia, pero con un vil engaño, muy de acuerdo con los usos y costumbres de los dos integrantes de esta fracción. ¡Ese es el concepto, esa la visión, esa la manera de hacer política de estos dos diputados plurinominales!
Enfada la simulación, pero debe encanijar más la ausencia de contenidos noticiosos, la trivialidad informativa, la ligereza mediática, para hacer de este engaño una nota. Es más digno de aparecer en cualquier medio el resultado de la elección de la mesa directiva de la sociedad de alumnos de un kindergarden, que esta jugarreta.
Pero ahí los tenemos, cobrando religiosamente y simulando velar por los intereses ciudadanos.
¿Hasta cuándo, me pregunto?
Por cierto, ¿ya habrá pagado Concha el refrendo del coche de su marido que el año anterior andaba con placas foráneas?