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15/03/2018

PERCEPCIONES / Librito

“Tan perjudicial es desdeñar las reglas como ceñirse a ellas con exceso”
Juan Luis Vives

López Obrador sigue en la ortodoxia, sin despegarse del “librito”, siguiendo a pie juntillas lo que los teóricos de la estrategia y mercadotecnia política llevan años diciendo, por ello desdeña y rehúye al debate con otros contendientes por la Presidencia; en la punta de la carrera considera que tiene más que perder que qué ganar.

Lo de “jugar con el librito” tiene su origen en el beisbol en donde la implementación de estrategias en situaciones específicas ha dado resultado durante largos años; el que un manager vaya contra esos cánones es considerado un gravísimo pecado y aún y cuando el no seguir la norma llegue a funcionar, el señalamiento por no haber atendido “el mandamiento” es causa de severas críticas.

Sin embargo de un tiempo a la fecha existe una nueva corriente en el beisbol que recomienda cambiar “el librito” por el factor sorpresa; dicen que al conocer todos las mismas reglas, lo primero que hacen los oponentes es también tener antídotos contra “lo obvio”, de manera que no esperan un planteamiento diferente y de ahí que pueda conseguirse el avanzar camino a la victoria.

¿Qué sucedería si Andrés Manuel aceptase un debate con Meade, Anaya, Margarita, “El Bronco” y Ríos Peter, pero sí y solo sí, fuese bajos sus reglas?

¿Qué pasaría si los obligase a renunciar a “echar montón” y hacer alusiones personales? ¿Qué sucedería si en lugar de las aburridas réplicas y contrarréplicas les plantease que fuese un debate ilustrativo del pensar y sentir de cada aspirante, es decir un encuentro de ideas y propuestas? ¿No creerá López Obrador que su “visión de Nación” es más sólida que cualquier idea de otro candidato?

Porque también, de acuerdo a la nueva visión de los managers beisboleros, el jugar apegado a “el librito” te puede acarrear en estos tiempos críticas por pecar de tímido y mojigato. ¿Es un hombre instalado en la comodidad de su zona de confort lo que este país requiere? ¿Será suficiente para México un presidente que confiado en el status del momento no tenga visión de futuro y sea capaz de asumir riesgos?

Jugar con “el librito” o hacerlo sin él, he ahí el dilema.

ftijerin@rtvnews.com