“Justicia que no es pronta y expedita, deja de ser justicia”
Consigna jurídica
Flaco favor le hacen los integrantes del Tribunal Electoral del Estado de Nuevo León a los regiomontanos al aplazar la determinación sobre la elección del Ayuntamiento de Monterrey.
Lejos de propiciar un clima de confianza, la decisión y mucho más que ello las formas, terminan enrareciendo el ya de por sí confuso ambiente alrededor del proceso.
Porque sí, estamos de acuerdo en que se promovieron más de cien recursos de inconformidad, pero si son de sobra conocidos los antecedentes, no había que esperar a una audiencia de pruebas y alegatos que duró sólo diez minutos, ¡diez minutos!, y salir con la novedad de que requerían más información dejando en suspenso las cosas.
La elección tuvo un cerradísimo resultado entre Felipe de Jesús Cantú, candidato del PAN, y Adrián de la Garza, aspirante por el PRI que busca reelegirse en el cargo; desde el mismo día de los comicios hubo denuncias de situaciones anómalas y era sabido que llegarían a esta instancia, la pregunta es: si ya sabían todo lo anterior, ¿por qué los Magistrados no pidieron con antelación la información para proceder de inmediato?
Quien resulte ganador, cualquiera que sea, terminará con una fuerte loza sobre sus espaldas pues la mitad de los electores que participaron en la jornada comicial votaron en su contra, pero si además hay denuncias de falta de boletas y urnas, de votos no contabilizados, de extrañas diferencias de resultados, el irresponsable proceder del Tribunal le termina poniendo gasolina a la lumbre.
Alargar los plazos lejos de brindar confianza a la ciudadanía pone en el ojo del huracán a los integrantes del Tribunal, porque de manera natural saltarán preguntas como “¿para qué quieren más tiempo, qué pretenden, qué esperan?
Casi un mes después de las elecciones los integrantes del Tribunal Electoral del Estado salen en una audiencia que solo duró diez minutos a decir que necesitan más información.
Habrá que recordarles la máxima que dicen que “justicia que no es pronta y expedita, deja de ser justicia”.