“Entre abogados te veas”
Refrán popular
Conforme avanza el tiempo siguen apareciendo “sorpresas” en estos tiempos inéditos de Nuevo León.
La doble negativa por parte del Congreso a las propuestas del Ejecutivo a los nombramientos de los posibles titulares de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos han provocado llegar al extremo de la designación directa por parte del Gobernador, prevista en las leyes, pero en un escenario nunca antes visto, lo que a su vez ha generado una controversia sobre quién debe tomarle la protesta de ley para que asuma el cargo.
El escenario no puede sorprender a nadie porque de antemano se supo que la segunda propuesta sería bloqueada en una revancha entre partidos, por lo que mucho antes de la definición de la nueva titular ambos poderes tendrían que haber revisado a profundidad el procedimiento, pero de nueva cuenta las circunstancias se pusieron en contra y a pesar de estar en periodo vacacional el Secretario General de Gobierno tuvo que anunciar la designación a fin de evitar concluyesen los tiempos legales para hacerlo.
La escena de ayer en el Congreso, la junta urgente con los abogados del Ejecutivo y la postergación de la toma de protesta tendrían que haberse evitado con oficio y sobre todo previsión de escenarios, pero repito, como se trata de situaciones inéditas han agarrado a todos fuera de base.
En ánimo de abonar a la escasa credibilidad y confianza que la ciudadanía tiene en los funcionarios públicos de todos los niveles, sería prudente que de cuando en vez las partes se tomasen un respiro, se anticipasen a los acontecimientos y se hablaran para sentarse a la mesa a resolver las cosas antes de dejar que sucedan y responder pasando la pelota al otro lado de la cancha, porque al final la imagen que proyectan es de un desconocimiento absoluto de las cosas, además de leguleyos, pretextosos y estorbantes nomás por fregar.
Bastante tenemos los ciudadanos con carecer de funcionarios en lugares como la Comisión de Transparencia, ahora en la Comisión Electoral, como también en Derechos Humanos y todo porque no son capaces de sentarse a la mesa, ver el mapa completo y dialogar, base de la política, negociar, pedir y conceder.
¿Qué les parece si en lugar de estar buscando el “cómo no” de las cosas, se ponen a chambear para avanzar en el “cómo sí”? Digo, porque tampoco es necesario recordarles que para esto último es que se les paga.