“Tomate esta botella conmigo…”
José Alfredo Jiménez
Cerramos un año más.
Como a la mayoría, el 2017 nos ha traído de todo, alegrías, tristezas, éxitos, tropiezos, enfermedades, recuperaciones y experiencias, muchas experiencias.
Ningún año es igual a otro, todos tienen sus particularidades y en Nuevo León seguimos aprendiendo de los nuevos tiempos y formas de la vida pública y la política; aprendemos los ciudadanos, pero también los partidos y los propios políticos que en los próximos meses deberán enfrentar una manera distinta de promoverse y proyectarse al electorado.
Hemos refrendado lo tantas veces dicho pero pocas veces atendido: las encuestas son una herramienta, una foto de un momento, no la panacea y mucho menos la verdad escrita, fallan estrepitosamente y con mucha mayor frecuencia de lo que pensamos.
“No todo lo que brilla es oro” y en el primer semestre del año que está por llegar tendremos la oportunidad de ver, como dicen en el rancho, bonitas “carreras parejeras” en las que con casi absoluta certeza tendremos finales “de fotografía”.
Con el Constitucional de licencia y en campaña, tendremos gobernador interino que tendrá la responsabilidad de mantener el barco a flote y en rumbo, navegando sin sobresaltos en medio de las turbulentas aguas de las campañas políticas. Tendremos además alcaldes y diputados buscando reelegirse y habrá un montón de independientes probando suerte.
Año político con elección presidencial, el 2018 será movidito en Nuevo León.
La mejor recomendación para los tiempos por venir es ser analítico, pensar las cosas, contrastar, no dejarse llevar, tener sumo cuidado con las fake-news y la rumorología.
Mi mejor deseo: que todos tengamos salud, trabajo y realizaciones.
Alcemos la copa para brindar por un año más que terminamos y otro que estamos por iniciar.
¡Mil felicidades!
