“Todas las acciones cumplidas sin ostentación
y sin testigos me parecen más loables”
Cicerón
Miércoles dos de la tarde, hora pico para variar en la siempre congestionada Avenida Lázaro Cárdenas de San Pedro a Monterrey y de pronto una larga fila hace que casi detengas la marcha por completo.
Con el tiempo medido para ir a comer a casa, los automovilistas sufren los 40 grados centígrados en medio de un macro embotellamiento. Todos pensamos que se debe a algún accidente de tráfico, pero metros más adelante descubres que no es así y que el motivo del “trancón”, como dicen en Colombia, es un filtro instalado por la policía de San Pedro a la salida del municipio.
Intento, pero no logro comprender este tipo de operativos.
Si los simples mortales cada fin de semana se enteran en minutos de la ubicación exacta de cada operativo antialcohol que se instala en la zona metropolitana, ¿con qué ingenua inteligencia nuestras autoridades piensan que la delincuencia organizada no sabrá que han instalado un retén en un punto determinado?
Al esperar cruzar el punto recordé la escena de la serie “El Patrón del Mal” en la que Pablo Escobar y su primo llegan a un retén y cuando el policía les pide sus documentos y el permiso para portar armas Escobar le dice que no tiene ninguno, nervioso el oficial pregunta que por qué y el narco responde llanamente: “Porque somos bandidos”, y así les da el paso.
No he sabido que ninguno de estos operativos haya dado con la detención de nadie. Quiero imaginar qué pasaría si un día se les aparece una célula del crimen organizado armada hasta los dientes, ¿qué pasaría? ¿los dejarían pasar? ¿se armaría la pelotera con decenas de civiles a su alrededor?
Me parece que esta clase de filtros son más bien para “hacer como que hacen”, pero sin hacer nada, buscando atacar la percepción y no la realidad.
Lo que sí tengo claro es que resulta criminal para los ciudadanos el tener que perder horas hombre en medio de un calor infernal en pleno mediodía en una avenida de alto flujo, casi siempre atiborrada, para dar la sensación de que están haciendo algo; me parece además criminal el que con su proceder incrementen las partículas contaminantes al ambiente al concentrar vehículos encendidos.
El proceder atenta contra la norma básica de “investigar para detener” y no al revés “detener para investigar”.