“En el pecado llevarás la penitencia”
Refrán popular
Podrá Rebeca Clouthier acusar y quejarse todo cuanto quiera de haber sido traicionada por el PAN y burlarse de quien ahora llama “El Oso Mañoso”, refiriéndose a Raúl Gracia, pero lo cierto es que la culpable de que esa traición en específico se haya dado no es otra que la Rebe misma.
Porque no se quejaba igual, ni pedía apoyo del Comité Nacional, ni acusaba a Raúl Gracia cuando este le apoyó para que se convirtiese en la candidata a la alcaldía de San Pedro, por encima de los deseos de Mauricio Fernández.
Por lo mismo la señora Clouthier jamás hizo una exclamación contraria o advertencia de existía una intromisión en sus filas cuando se dejó imponer en su equipo de campaña a personas y asesores que le fueron enviados directamente por Gracia y que le reportaban directamente al ahora diputado y atendían sus instrucciones por encima de lo que la candidata dijese o pensase.
De manera que si antes no se quejó, no tiene ahora por qué venir a patalear y hacer berrinches, porque Rebeca no es ninguna neófita o bisoña en estas lides, conoce y conoce bien a Gracia y sus formas, métodos y procedimientos, de tal suerte que no le debería extrañar que haya sucedido lo que al final pasó.
Por contrario, si cuando arrancaba la campaña hubiese dado un manazo en la mesa, se hubiera puesto la camiseta con la imagen de su padre y públicamente hubiese denunciado la abierta y total intromisión de la que fue objeto su equipo, estoy cierto que muchos le habrían aplaudido la postura y con gusto le hubiesen otorgado su voto.
Llorar ahora y denunciar al villano, como también el interponer denuncias tras haber perdido, no tiene razón de ser ni objeto alguno.
En el pecado de aceptar las condiciones que le impusieron, llevó también la penitencia.
